Monday, April 23, 2007

EL NEGOCIO INMOBILIARIO

Desde siempre, el poder imperial estuvo vinculado a la acumulación de grandes territorios. Hoy grandes corporaciones transnacionales y nacionales retoman esta estrategia. Con el pretexto que fuere -emprendimientos turísticos, cotos de caza o simplemente como residencias temporales o permanentes- el aumento de la demanda de este tipo de inversores en la región ha modificado notoriamente el valor estratégico de las tierras.


En la Patagonia argentina las tierras son vendidas a grandes terratenientes e inversores de capitales extranjeros. Esta elite acude y golpea las puertas de las inmobiliarias y de los gobiernos con el suficiente poder para negociar según sus propias condiciones. Hasta pueden no moverse de sus casas: un simple paseo por Internet es todo lo que tienen que hacer si la idea es transformarse en una especie de latifundista online.


En la web, algunos sitios brindan abundante información para instar a inversionistas a adquirir extensiones territoriales en la región. Apelando a los beneficios de la creciente explotación turística y a los bajos precios de las propiedades, estas haciendas virtuales han seducido y seducen a poderosos.

En los últimos años se efectivizó la venta de 4,5 millones de hectáreas de la Patagonia, adquiridas por inversores extranjeros. Tan sólo uno de ellos, el empresario italiano Luciano Benetton, se posicionó como el propietario del 9% de las mejores tierras de la región. Sin contar que en el resto del país, de las 44 millones de hectáreas productivas, 16 ya están en manos foráneas

Las tierras de la Patagonia, sobre todo las que abundan en agua potable ( es la segunda reserva mundial ) son un bien codiciado por empresarios poderosos. Los hermanos italianos Luciano y Carlo Benetton y el empresario comunicacional estadounidense Ted Turner y Charles Lewis, son los más conocidos, junto a otros notables del espectáculo como Sylvester Stallone y Michael Douglas, y el filantrópico Thompkins.

Lewis y su mano derecha Van Ditmar hacen lo imposible para quedarse con todas las tierras alrededor de lo que ya han adquirido, y donde tambièn existen nacientes de agua pura y cristalina.

A diferencia de otras naciones, la Argentina sólo tiene protegido un ínfimo porcentaje de su territorio, incluyendo sus zonas de seguridad.

Por ejemplo, el 90% del total de las explotaciones mineras están en manos de multinacionales extranjeras, lo que confirma el saqueo y la entrega silenciosa de los recursos.

Los reclamos de vecinos particulares y de las comunidades locales aparecen como una tibia resistencia frente a los emprendimientos transnacionales, que cuentan con fuertes aparatos de difusión a su favor y estrategias de seducción efectivas.

¿Pero qué hace el gobierno nacional al respecto?

EL AMIGO LEWIS

La cordillera patagónica es uno de los espacios más bellos de nuestro país. Contiene cadenas de montańas, glaciares, mallines y pampas, densos bosques , lagos, ríos y una variada flora y fauna.

Como patrimonio nacional, es un bien común de todos los habitantes, con grandes potencialidades para nosotros, nuestros hijos y aquellos que han elegido este suelo para vivir .

Cuando se habla de patrimonio público no es hacer referencia solamente a la posibilidad de visitar y disfrutar ocasionalmente del paisaje sino también por ejemplo, la posibilidad de trabajar u obtener la tierra, o de vivir en este lugar sin patrones.


La mayoría de la población no conoce ciertos lugares, ni interviene efectivamente en la
definición de su uso y acceso, a pesar de que le pertenece por derecho propio y por la misma constitución.

Al menos en teoría, una de las leyes que defiende este patrimonio, funciona así: Los lagos y cursos de agua de toda la región deben ser de acceso público y nunca podran ser privados o cercados.

La ley obliga a garantizar el libre acceso a estos lugares. Y las provincias deben proveerlo, mediante las obras e infraestructura necesarias.

Uno de los casos mas conocidos y controvertidos al respecto ha sido el famoso caso del "Lago Escondido", O "Hidden Lake" como gusta llamarse la empresa que lo regenta.

Charles Joe Lewis, hace ocho años hizo pie en territorio patagónico comprando un inmenso predio de tierra fiscal entre Bariloche y El Bolsón.Las 14 mil hectáreas que la familia Montero -pobladores originarios de la zona con su propia historia terrateniente, ahora "arrepentidos" - estan ubicadas en el área delimitada entre la margen sur del río Manso, la frontera con Chile y el Paralelo 42.

Un inmenso y paradisiaco territorio, rodeado de altos picos, que se extiende hacia la frontera, desde la ruta hasta donde no alcanza la vista. El lugar incluye cadenas de montañas, ríos y glaciares.

Pero lo mas curioso es que dentro de los límites de lo comprado por el magnate británico en 1997 quedó la totalidad del "lago Escondido", cuyo acceso desde ese momento comenzó a ser vedado al público por los custodios armados .

La empresa "Hidden Lake" interpreta la ley como quiere y logra que el Estado rionegrino apruebe el camino más corto dentro de esa propiedad, que ha sido asfaltado y mantenido por sl propietario, constituyendose entonces como camino privado, con el derecho a que el mismo deje pasar o no a quien sea segun su antojo.

Sin embargo el tema de acceso al Lago es de secundaria importancia frente a otras tareas que se estarían desarrollando dentro de la propiedad de Lewis, como la expansion de los terrenos, la tala de algunos àrboles milenarios, el desvio de arroyos y el famoso "embotellamiento de agua".

Mas alla de que esto último no sea por si mismo un delito y se cuente que la botella de agua mineral de Lewis se vende en algunos hoteles cinco estrellas del hemisferio norte a 5 dolares- El desvío y control de arroyos dentro de una propiedad privada sí puede serlo y afectar a los pobladores de zonas aledañas.